Después de unos meses de parón en el blog, hoy por fin saco un ratito para publicar una nueva entrada.
Os voy a mostrar un reportaje de comunión del verano pasado, sí, sí, VERANO. Normalmente las comuniones tienen lugar durante la primavera, especialmente el mes de mayo, pero el año pasado, tuve a niños que la realizaron en meses de pleno verano.
Sandro llevaba un traje poco convencional, fuera de lo común y muy original para una primera comunión. Cada niño es único y por eso cuidamos cada detalle para su gran día, pero además en esta ocasión, Sandro compartió día con su prima Aitana, yendo los dos súper guapos y conjuntados.
Sin más os dejo con su sesión, más adelante os mostraré también la de su prima.